El Papa Francisco y la Virgen de Luján

8 de mayo, 2013. (Romereports.com) Como ya es costumbre, Francisco pasó entre los más de 70.000 peregrinos que llenaban la Plaza de San Pedro durante más de 45 minutos.

En varias ocasiones Francisco paró el papamóvil y se bajó para saludar a niños enfermos o con discapacidad.

Antes de que comenzara la audiencia, una niña vestida de primera comunión entregó al Papa un ramo de flores que después él puso a los pies de una imagen de la Virgen de Luján, patrona de Argentina. Hoy la Iglesia católica celebra su día.

Por eso, de manera divertida, durante el saludo en español el Papa pidió un fuerte aplauso para la Virgen.

PAPA FRANCISCO
“En este día en el que se celebra Nuestra Señora de Luján, celestial patrona de Argentina, un aplauso a la Virgen de Luján. Más fuerte, ‘non lo sento’. Más fuerte. En este día de la Virgen de Luján, deseo hacer llegar a todos los hijos de esta querida tierra argentina mi sincero afecto, a la vez que pongo en las manos de la Santísima virgen todas sus alegrías y preocupaciones”.

Siguiendo las catequesis del Año de la Fe, el Papa explicó la importancia del Espíritu Santo en la fe cristiana.

PAPA FRANCISCO
“El Espíritu Santo, que procede del Padre y del Hijo, Cristo lo ha derramado en nuestro corazón, para hacernos hijos de Dios y para que nuestra vida sea guiada, animada y alimentada por él. Esto es precisamente lo que entendemos al decir que el cristiano es un hombre espiritual: una persona que piensa y actúa siguiendo la inspiración del Espíritu Santo”.

El Papa explicó que cuando se dice que el “cristiano es una persona espiritual significa que piensa y actúa siguiendo la inspiración del Espíritu Santo”. Francisco también comentó sus frutos.

PAPA FRANCISCO
“La existencia del cristiano, dice san Pablo, es animada por el Espíritu Santo y rica de sus frutos, que son: «Amor, alegría, paz, comprensión, servicialidad, bondad, lealtad, amabilidad, dominio de sí». El don precioso del Espíritu Santo es, pues, la vida misma de Dios, en cuanto verdaderos hijos suyos por adopción”.

Entre las miles de personas que llenaban la plaza de San Pedro, se encontraban presentes grupos de China, Irán, Indonesia o la India.

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